Mientras ellos ven la virginidad como un premio que se debe arrebatar, para nosotras puede ser una temática algo mas delicada, sobretodo cuando se convierte en un tema familiar o o que afecta nuestra autoestima, por lo cual cuando se llega a este unto se debe pensar en un procedimiento de reconstrucción láser.
Lo que ellos ignoran es que el himen y la virginidad no siempre están ligados a una activa vida sexual. Muchas mujeres han desgarrado su himen al practicar deportes, sobretodo la equitación, pues el constante movimiento y presión en la zona puede provocar lo que un hombre aun no logra.
Algunas de nosotras ni siquiera le damos importancia para nuestro propio ser, pues nos gusta disfrutar de nuestra sexualidad. Pero hay otras mujeres que por razones religiosas, culturales o sociales necesitan una solución que les permita ser de nuevo aceptadas.
Este es un procedimiento que normalmente se debe consultar siempre con la pareja, pues las implicaciones que tiene de realizarlo sin consultar pueden ser grandes. Para llevarlo a cabo se aplica anestesia local o intravenosa pues se debe procurar la seguridad de la paciente.
Existen 3 tipos de reconstrucción del himen, el primero es la simple reparación en la cual se reúnen los remanentes desgarrados para cerrar la brecha abierta. Una solución temporal al problema es la aloplantia, en el cual un material biométrico el cual se puede atravesar se introduce en la vagina para que haga las veces de membrana.
Por otra parte tenemos la vaginoplastia, la cual es una operación donde se realiza una incisión en las membranas vaginales para sacar material que va a ser unido de tal manera que haga las veces de himen. Este procedimiento debe llevarse a cabo con varias noches de antelación de la boda para que la vagina tenga tiempo para sanar.
Normalmente estos procedimientos no toman mas de 2 horas y en el caso de la reparación de himen y la aloplantia la paciente puede volver a sus labores el día siguiente.
Con estas técnicas podremos retroceder el tiempo y devolvernos las características que sus genitales tenían antes del inicio de su vida sexual.
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