Aunque no sea creíble para muchos hombres, el himen de una mujer puede desgarrarse mediante la practica de deportes que requieran un gran cantidad de esfuerzo físico o que requieran fuerza en el área de la cadera como lo son la cabalgata, ciclismo o la gimnasia.

Según los expertos, con el esfuerzo físico y el calor se incrementan las probabilidades de sufrir un desgarro muscular y al estar el área pélvica en constante presión y fuerza nos puede

Aunque el carácter moral de la mujer no ha cambiado pues no ha tenido relaciones sexuales, el desgarro de su himen indica que se ha perdido la característica biológica a la cual la virginidad se encuentra asociada. Por este motivo muchas mujeres desean una solución que les permita evitar algún tipo de inconvenientes en los círculos sociales que frecuentan por su pequeño percance.

Pero esto no significa encerrar a las niñas en cajas de cristal e impedir su interacción con el deporte. Para seguir con su vida normalmente muchas han decidido optar por soluciones de carácter quirúrgico como lo son las 3 modalidades de himenoplastia: la reparación, la aloplantia y la vaginoplastia.

En los primeros dos procedimientos mencionados se busca reunir el himen desgarrado, sea mediante la unión de sus partes o por implantes biométricos penetrables para brindar de nuevo la sensación de la primera vez.

Por otro lado, la vaginoplastia es un procedimiento quirúrgico en el cual se hace una incisión en las membranas vaginales para sacar material que va a ser unido de tal manera que haga las veces de himen. Debido a la naturaleza de esta operación la paciente debe descansar un tiempo prudencial indicado por su doctor antes de realizar esfuerzos en el área pélvica.

Con tales soluciones a la mano que no requieren mayor esfuerzo o recuperación las mujeres podemos liberarnos del estigma y volver a nuestras actividades normales pues tenemos una segunda oportunidad en la virginidad que solo requiere consultar al doctor.